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Claves para trabajar como nutriólogo deportivo

Alejandra Huerta Arreola

Los licenciados en nutrición generalmente no sabemos nada o casi nada de deporte. Brindar atención nutricia a deportistas no es complejo y puede ser muy gratificante, ya que, las intervenciones suelen ser exitosas cuando están bien planificadas y ensayadas, pero hay que saber del tema. La fisiología y los requerimientos energéticos y nutrimentales de un deportista no son los mismos que los de la población promedio, por lo que, no podemos abordarlos bajo los mismos supuestos. Por ejemplo, un deportista puede beneficiarse ampliamente de un consumo elevado de hidratos de carbono simples y de sodio, a diferencia de un paciente con enfermedad metabólica. No es infrecuente toparnos en la consulta a deportistas con cargas pesadas de entrenamiento que han visitado nutriólogos no expertos en el área, quienes les prescriben dietas muy reducidas en calorías o restringidas en cierto tipo de nutrimentos, y que lejos de beneficiarlos, comprometen su salud y su rendimiento al ocasionarles una insuficiencia energética.

Por ello te dejo aquí algunas recomendaciones si quieres dedicarte al tema:

Especialízate:

Actualmente existen varias opciones de programas en nutrición deportiva tanto en México como el extranjero, desde diplomados, hasta maestrías, doctorados y post-doctorados. También hay formaciones que no otorgan propiamente un grado académico, pero que son de muy alta calidad y exigencia como es el Diploma del Comité Olímpico Internacional, y algunos otros programas dirigidos por nutriólogos deportivos de prestigio. Antes de inscribirte, asegúrate que tengan profesores expertos, ya que desgraciadamente hay mucha oferta “patito”.

Asiste a tantos congresos y conferencias como puedas:

La nutrición deportiva está avanzando a pasos agigantados y si no te mantienes actualizado, tus pacientes te van a sorprender con productos y estrategias nutricias de las que no estarás al tanto. Algunos eventos de prestigio son la conferencia anual de ISENC, los seminarios del Instituto Gatorade y WorldwidE Nutrition conference.

Afíliate a alguna asociación o federación de nutrición deportiva:

El contacto con colegas te enriquecerá y te permitirá acceder a formación continua y estar al tanto de las novedades en tu región.

Practica deporte:

El ejercicio no es lo mismo que el deporte, ya que éste último implica una estructura y una serie de reglas con fines competitivos. Si tú practicas activamente uno o varios deportes te será mucho más sencillo familiarizarte con las estrategias nutricias y conseguir pacientes.

Hazte experto en un deporte o un tipo de deportes:

El universo de posibilidades es tan amplio que es imposible abarcarlo todo. Por ejemplo, no se parece en nada la nutrición para un maratonista que para un lanzador de martillo. Especialízate en algo, y qué mejor si es en el deporte que tú mismo practicas.

Recuerda que en Nutrify puedes calcular la actividad física de tu paciente de 3 formas distintas: METs; Nivel de actividad física (PAL); y Energía gastada por ejercicio (reloj, aparatos de ejercicio, aplicaciones, etc.).

Asimismo, puedes encontrar precargadas fórmulas para calcular el gasto energético en deportistas como la de Katch-McArdle o la de Cunningham.

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