Como nutriólogo, trabajar con picky eaters puede ser un reto. Estos niños pueden presentar dificultades para seguir una dieta adecuada, lo que puede tener un impacto negativo en su salud. Sin embargo, existen estrategias que los nutriólogos pueden utilizar para abordar este problema.
La selectividad alimentaria en los niños puede estar relacionada con factores biológicos, psicológicos y sociales. Por ejemplo, algunos niños pueden tener una mayor sensibilidad a los sabores amargos o ácidos, mientras que otros pueden tener aversión a ciertas texturas. Además, la selectividad alimentaria también puede ser influenciada por el entorno familiar y social.
Es importante que los nutriólogos fomenten la variedad y el balance en la dieta de los niños. Para ello, se pueden ofrecer opciones saludables y variadas de frutas, verduras, proteínas y carbohidratos complejos en las comidas. De esta manera, se puede garantizar que los niños reciban los nutrimentos necesarios para su crecimiento y desarrollo.
Los nutriólogos pueden aplicar técnicas conductuales y psicológicas para ayudar a los picky eaters a ampliar su repertorio alimentario. Estas técnicas pueden incluir la exposición gradual a nuevos alimentos, el refuerzo positivo, el modelado y la modificación de la textura y el sabor de los alimentos.
La creatividad puede ser una herramienta efectiva para incentivar a los niños a probar nuevos alimentos. Por ejemplo, se pueden utilizar diferentes formas de cocinar los alimentos, agregar especias y hierbas para mejorar el sabor o involucrar a los niños en la preparación de la comida.
Aquí te dejamos algunas ideas de recetas saludables, deliciosas y divertidas:
Son una excelente idea para involucrar a los niños en la preparación de sus alimentos. Solamente necesitas rice cakes y los toppings de tu preferencia, como plátano, fresas, moras azules, hummus, crema de almendras o de cacahuate, aguacate, queso, zanahorias, pepino, jitomates cherry, cereal, manzana, entre otros.
Cubre panes integrales con salsa de jitomate natural, queso rallado y verduras picadas. Hornea por unos minutos hasta que el queso esté derretido. Puedes utilizar el queso y las verduras para ponerle una carita feliz a tu pizza.
Los licuados son una excelente opción para los niños picky eaters que no les gustan las verduras. Mezcla en una licuadora leche, yogurt natural, frutas frescas como plátanos, fresas o mango, y agrega espinacas o col rizada para agregar nutrimentos adicionales sin alterar el sabor. Si los niños son muy resistentes a las verduras, puedes comenzar con una pequeña cantidad y aumentar gradualmente.